Bodegas Altanza

En una majestuosa construcción, Bodegas Altanza es un símbolo de la tradición vinícola de La Rioja con unos vinos tintos de largas crianzas.

Vinos tintos de calidad con DOC Rioja accesibles a todo el mundo. Con este propósito se fundó en 1998 Bodegas Altanza, y aun se puede decir más, para elaborar tintos reservas y grandes reservas. Las bodegas se ubican en La Rioja Alta, en el municipio de Fuenmayor. Transmiten tradición a la vez que encierran en sus instalaciones última tecnología para la
vinificación, crianza y guarda de los vinos. La tradición por un lado se manifiesta en su diseño arquitectónico y materiales de construcción utilizados, por otro, en el empleo de la variedad autóctona Tempranillo como base de sus vinos, una vinificación que empieza con prensados verticales y en la que se emplean tinos de madera para conseguir la calidad esperada de Bodegas Altanza.

La bodega dispone de unas 200 ha de viñedo propio, y completa las necesidades de producción con la aportación de un 40% de uva procedente de viticultores de confianza comprometidos con los estándares de calidad exigidos por Bodegas Altanza. En todos estos cultivos, se exige el compromiso de practicar la actividad vinícola con el máximo respeto al medioambiente, con el cuidado y mantenimiento del viñedo empleando métodos sostenibles y ecológicos.

Todos los vinos de las Bodegas Altanza de La Rioja realizan las crianzas en un parque de 8.500 barricas bordalesas de 225 litros, siendo el 90% de roble francés y el resto americano, renovándolas después de haber pasado un periodo de envinado de 5 años.

Por mencionar uno de sus vinos tintos, el Lealtanza Reserva, de Bodegas Altanza, es un vino 100% Tempranillo que permanece durante un periodo 18 meses en barricas de roble francés y otros tres en tinos del mismo tipo de roble, finalizando la crianza en botella por 12 meses más. El vino resulta ser aromáticamente complejo, mostrando una buena armonía entre los aromas puramente varietales y los derivados de la crianza en madera. En boca es sedoso y carnoso, con un paladar afrutado y potente, equilibrado y muy bien estructurado.